Blogger:
Joaquín Robledo Medalla
Kinesiólogo
Diplomado en Rehabilitación Deportiva.
Departamento de Salud Estudiantil, ULS.
La rutina diaria de todas las personas, en diversos ámbitos, ha cambiado debido a la pandemia de COVID-19. Uno de estos hábitos ha sido la práctica de actividad física, que se trasladó de gimnasios, clubes o aire libre, entre otros, a casa.
Además, está quiénes, como parte de las estrategias personales para sobrellevar la cuarentena, desean abandonar el sedentarismo y comenzar a realizar actividad física.
a) Calentamiento. Consiste en ejercicios que trabajan movilidad, flexibilidad y
activación de la musculatura con el objetivo de preparar el cuerpo para la
sesión.
b) Entrenamiento cardiovascular. También conocido como “cardio”, son ejercicios
que potencian al sistema cardiovascular. Son de larga duración, involucra
varios grupos musculares de forma simultánea, por ejemplo, el trote, bicicleta,
elíptica, saltar la cuerda.
c) Entrenamiento de fuerza. Es un trabajo muscular más localizado, se puede
realizar con el peso corporal o cargas externas, se dosifica con repeticiones y
series. Según la evidencia científica, están recomendados para prevenir
lesiones y para mejorar la composición corporal.
d) Vuelta a la calma: última fase de la sesión, consiste en recuperar los
niveles de frecuencia cardíaca y ritmo respiratorio, a través de la
flexibilidad dinámica, recuperación activa y ejercicios de respiración.
Esta forma de planificar una sesión se puede desarrollar con diferentes modalidades de ejercicios, por lo que se deja abierta la invitación para una próxima ocasión con el objetivo de detallar y ejemplificar que ejercicios realizar en las etapas ya mencionadas.
Esta forma de planificar una sesión se puede desarrollar con diferentes modalidades de ejercicios, por lo que se deja abierta la invitación para una próxima ocasión con el objetivo de detallar y ejemplificar que ejercicios realizar en las etapas ya mencionadas.
Además,
es fundamental tener ciertas consideraciones para respetar los principios del
entrenamiento como individualización, progresividad y variabilidad, entre otros
aspectos.
En este
sentido, es muy importante que tengas en consideración los siguientes aspectos,
antes de entrenar en casa:
1. Conoce nuestros límites físicos y mentales.
2. Proponte metas que se basen en rendimiento y/o
resultados. Te sugerimos que todos los objetivos sean específicos, medibles,
alcanzables, realistas y se proyecten en el tiempo.
3. Considera tu estado de salud acorde a tu edad,
patologías de base y/o lesiones previas para, de este modo, ajustar intensidad,
frecuencia y volumen.
4. No es necesario tener implementos sofisticados para
el entrenamiento.
5. El hábito de la actividad física se debe
complementar con una alimentación saludable, hidratación adecuada y mantener un
sueño reparador.
6. La dosificación de la actividad física también es
parte del entrenamiento. Cantidad no asegura calidad.
7. La Organización Mundial de la Salud, recomienda 150
minutos semanales de actividad física moderada.
El punto más importante para evitar complicaciones relacionadas a la
actividad física y mantener un control del estado de salud, consiste en consultar
a profesionales de la salud y del área física para ser asesorados de forma
responsable con un enfoque integral.
Referencias:
American Heart Association Recommendations
for Physical Activity in Adults and Kids | American Heart Association. (n.d.).
Retrieved April 24, 2020.